Diez películas para el final del otoño Listas inservibles (53)

26/11/12

Diez películas para el final del otoño
(como excusa de veteranos... para hacerse un homenaje a media tarde)
x Sergio Casado

“Tres colores: Rojo”, de Krzysztof Kieslowski.

El juez cansado y la modelo inquieta. Imprescindible. Visionado con licor de pera y una tableta de chocolate con almendras.

“Eyes wide shut”, de Stanley Kubrick.

Los fantasmas, los misterios, lo inexplicable, las perversiones. Se sugiere acompañarlo con Cardhu e ir tomándolo en chupitos.

“Delitos y faltas”, de Woody Allen.

Para superar el mal rollo que transmite Landau, tener a mano una buena selección de hojaldres y carajillo de crema de whiskey.

“El nombre de la rosa”, de Jean Jacques Annaud.

Un monasterio chungo con historia policíaca. Interesa tener cerca el licor Fra Angelico y un muffin gigantesco para resolver el crimen.

“El buscavidas”, de Robert Rossen.

Clásico inmortal. Lo mejor aquí sería Jack Daniel´s con unas almendras saladas (a gusto).

“Caudillo”, de Basilio Martin Patino.

Para saber de donde venimos y si queremos ir a alguna parte. Leche con remojones (o sea, pan de días pasados).

“El más allá”, de Lucio Fulci.

Festival Zombie Delirante. Y para no convertirse en un zombie, una buena breva de crema y un tazón de chocolate.

“La última noche” de Spike Lee.

Amigos a los que coge la riada de la vida. Para resistir los golpes, una salchicha picante de media tarde con una Ámbar Export.

“Leo”, de José Luis Borau.

Resistentes del polígono. La vida gris y sin esperanza. Para ambientarse, tirar de tónica económica y ginebra Gordon´s.

“Cyrano” de Jean Paul Rappeneau.

Para no olvidar lo que es un actor de verdad. Por el puro placer del gran cine. Acompáñese de un poco de turrón y café bombón.